El fuego comenzó en las inmediaciones de una ventana que da a la calle y luego se extendió hacia otras dependencias. Dos albañiles de apellido Sotello que se encontraban trabajando en las inmediaciones vieron el incendio y se acercaron a sofocarlo mientras esperaban la llegada de los Bomberos Vountarios, quienes arribaron al lugar poco después.

Al cabo de unos minutos, el fuego pudo ser contralado y se evitó que se propague a otros sectores de la emisora. En ese momento se estaba emitiendo el programa de Alberto Pierotti, el cual fue interrumpido, debido al intenso humo que invadió toda la radio.

Más tarde, Carlos Eduardo Caselli, propietario de la emisora radicó la correspondiente denuncia en la Jefatura Departamental de Policía ante la sospecha de que se trató de un atentado.

Horas después la transmisión volvió a la normalidad, aunque un sector de las instalaciones, utilizado como depósito, quedó seriamente afectado.